domingo, 27 de noviembre de 2011

Trilogia: Hábito- Rutina- Constancia

Hace un rato, hablando con mi hijo de cuando él era pequeño, le contaba como transcurrían los días , como era nuestra vida, la suya y la mía. Lo especial que era cada momento a su lado, especialmente de bebé. El baño, la lactancia,el cambio de pañales, ese olorcito tan característico de los primeros días de vida. El me miraba embobado pero con cara de satisfacción al ver mi rostro emocionado mientras lo recordaba. De repente, le he dicho; Arturo, me estoy dando cuenta de que desde los 3 años de edad, no te has vuelto a cortar las uñas. El se las ha mirado de inmediato y ha escondido los dedos cerrando las manos. Justo a los 3 años al empezar preescolar, fue cuando empezó a morderse las uñas y hasta hoy y, lo que te rondaré morena ya que, ese hábito que adquirió entonces, difícilmente podrá deshacerse de ello.

La rutina cotidiana, no me molesta ya que solo es algo que me rodea y, a pesar de ser algo totalmente artificial- en este caso, la palabra artificial significa todo aquello que está manipulado por el hombre aunque sea de origen natural- A pesar de esta trampa externa llamada ¨rutina¨, siempre se puede elaborar y mantener en paralelo esa armonía y aceptación interna llamada, persona. Por rutina entiendo todo aquel acto repetitivo; ir a trabajar, los atascos,ir al colegio, a la compra, las tareas domésticas y un gran etc.

La constancia en la acción, siempre tiene resultados, a veces buenos y otras menos. La constancia se puede confundir con el hábito o la rutina. Estos dos, no generan , sino que a la larga degeneran , son apáticos ,sistemáticos y un tanto aburridos. La constancia requiere responsabilidad, dedicación , nos ofrece emoción y genera perspectivas. Diferenciar la constancia en el trabajo a pesar de lo rutinario y habitual que suele ser, puede suponernos llevarlo mejor y encontrar aliciente o amargarnos del todo por el hecho de ver tan solo la rutina. Lo mismo sucede en el amor o en la pareja. Se puede tener una relación basada en la rutina y el hábito de estar y permanecer en parálisis o,se puede ser constante en ello y no solo sostener la relación sino mantenerla viva cada instante, constantemente alimentar el deseo, la complicidad, el amor, la amistad y todo aquel sentimiento de pueda derivar de ello. El estudiante que es constante, aquel que ve en los estudios algo más que la rutina y el hábito de estudiar, siempre encontrará la chispa necesaria para llegar o, al menos, hacerlo de manera más saludable.


Para mi, la constancia es esa batería inagotable que hace que obtengamos resultados de donde a penas existen.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Tú puedes...

No se porqué, pero cuando digo que me duele, nadie me ofrece un paracetamol. Cuando digo que estoy cansada, nadie me ofrece una silla. Cuando digo que estoy triste, nadie me intenta alegrar. Cuando digo que no puedo más, nadie me ofrece parar. ¿Será que inspiro poca credibilidad?

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Otra de mis chorradas

Hoy, mientras conducía de regreso del trabajo, callejeando y zig zagueando por los Madriles y, a pesar de todos lo posibles pesares, que les hay, no traía en mente ni a uno solo de estos. Precisamente, cuando tengo más pesares, es cuando más pensamientos o ideas ajenas a ello me llegan. Es como si un chip se pusiese en marcha alejando mis pensamientos a otro momento.

Según me dirigía calle Toledo abajo para cruzar a esa altura el río Manzanares y llegar al otro lado de la M-30 o actualmente calle 30, me he encontrado de frente con los dos obeliscos de la Glorieta de Pirámides, estos, por su forma, dan nombre a la misma. No me extraña que en ese momento, nada se me pasase por la cabeza ya que lo que divisaban mis ojos era extraordinariamente bello. Justo ha habido un momento en el cual, ambos , a pesar de estar en paralelo, han llegado a estar tan alienados que parecía que era mi vista que estaba duplicando un mismo objeto. El cielo estaba de un suave color lila y anaranjado y entremedias la luna resplandecía de un blanco espectacular haciendo que las otras nubes de alrededor pareciesen de plata. Nunca había presenciado una amalgama similar, supongo que he coincidido en ese preciso instante en el tiempo, donde se juntan o hacen el cambio de guardia el atardecer y la noche. EL viento soplaba lentamente y así es como estas,las nubes, se desplazaban , al igual que lo hacía yo al conducir. Nuevamente el ángulo cambió y ambos obeliscos quedaron en paralelo absoluto dandome la sensación de que estaban entre los dos sosteniendo el universo en su totalidad.
He sentido, lo bonita que es la vida, a pesar de no ser lo. He seguido pensando mientras conducía los últimos kilómetros a casa. He pensado en el mundo, en sus orígenes, en las galaxias exteriores a la Vía Láctea, en que están en continuo movimiento y en que quien dice que nosotros no lo estemos también y lleguemos a estar perdidos en el espacio infinito y, es que a caso no lo estamos ya. Si el universo está en expansión se puede rasgar. Si la densidad del tiempo es lo que creó la tierra, no hubo Big Bang sino todo lo contrario. De repente, he pensado en voz alta;

Se dio a luz. Nació sin llegar a este mundo. Fue el mundo y lo sigue siendo.

He comparado sin dudar ni un instante, la similitud existente entre la tierra y la mujer. Ambas existen con el propósito de dar vida. Ambas gestan, paren y confortan a los nacidos y ambas, reciben más a menudo de lo que debiese, el mismo mal pago. Ambas van envejeciendo, una muere irremediablemente y la otra, está a punto de convertirse en mortal.

martes, 15 de noviembre de 2011

Reacciones

El hombre, no acepta críticas alegremente, aunque alegremente las hace. No siempre la crítica es con fin correctivo, y tampoco lo es como simple crítica. Hay veces que criticamos porque nos encanta lo que criticamos y precisamente por esto lo hacemos, por celos o por envidia de no ser nosotros el motivo de critica. Otras, criticamos sin motivo por el hecho de hacer lo mismo que hacen con nosotros. Criticamos a aquel que critica y con este acto, ya estamos criticando nosotros. A veces, nos comentan sobre uno de nuestros actos o actuaciones sin pretensión alguna y el hecho lo transformamos en crítica directa acusativa, despreciativa, humillante, se nos retuercen las tripas por dentro, tanto si la ¨critica¨ es razonable o no. Esto sucede, porque siempre existe la posibilidad de ser criticados, ya que siempre queda la pequeña mota de imperfección, en cualquier aspecto de la vida. Nos cuesta aceptar la crítica de un igual ya que consideramos que, y éste que sabe, o al menos, no sabe más que yo. Sí aceptamos , aunque no nos guste tampoco, la crítica que provenga de un ¨superior¨ o especialista en la materia a criticar, ya que aunque su crítica pueda ser hiriente, y no siempre es así por ser una crítica negativa, ya que si ésta no es sincera, y puede darse el caso y nos estén vacilando, también resulta hiriente como pueda ser la critica negativa, pero con la diferencia que ésta última, la negativa, puede ser correctiva y beneficiosa. Hoy, me ha sucedido algo relacionado a lo que estoy hablando. He hecho un comentario- no una crítica- con toda mi buena intención, con el fin de ¨compartir¨y sentirme partícipe de algo que pensaba que así debería ser y, el otro bando, se ha sentido profundamente criticado dejando claro que sabía de la imperfección pero que no le importaba en absoluto. - imagino sus tripas en ese momento debido al tono de su voz y sus palabras- Acto seguido, las mías, las tripas, se me han revuelto también, al igual que mi lengua...
Si todos tenemos las mismas reacciones y, no nos gusta recibirlas del prójimo, porqué no nos aplicamos el antídoto contra todo el veneno que llevamos dentro.

lunes, 14 de noviembre de 2011

La Rosa de Jericó


Hace muchos años, escuché hablar a una anciana acerca de la Rosa de Jericó. Ella, contaba la leyenda de forma extraordinaria, completamente convencida de sus ¨poderes¨. Durante un tiempo busqué donde comprar una rosa pero, por entonces, todo esta menos asequible o al alcance y no encontré la forma de hacerme con una, no por el hecho concreto de creer que me traería suerte, sino por pura curiosidad de ver si efectivamente, una planta muerta, pudiese revivir al cabo de los años.

Hace cosa de un mes, pasé por una floristeria que había pasado por delante de la puerta mil veces y, en esta ocasión, miré al escaparate y allí vi unas de estas rosas. Entré y compré 2, una para mi casa y otra para dar -que no es lo mismo que regalar- a una persona especial. Cuando estuve preparada, decidida o motivada, saqué la rosa de su bolsita y sin hacer el ritual Arameo de la Esperanza, ya que a tanto no llego, sí di la bienvenida a ésta, a mi casa y le puse como es debido, un nombre. Preparé un bonito bol donde depositarla con su correspondiente agua y durante 7 días, la mantuve hidratándose, observando como efectivamente, va resucitando y hasta llega a adoptar un colorido aunque muertecino, algo verdoso. Supuestamente, hay que escribir en un papelito todo aquello que se desea, o al menos, lo que queramos que se cumpla y se pone debajo del recipiente. Llegado el séptimo día en el cual había que dejar de hidratar a la planta y entonces, pedir los deseos. No podía imaginar o pensar que era lo que quería desear ya que no era nada y lo era todo o, era todo que en realidad, no significaba nada. En un papelito, escribí; tú decides. Lo doblé lo máximo posible y lo deposité no debajo del recipiente sino encima del corazón de la rosa y me olvidé. Al cabo de unos días, fui a ver si aun estaba ¨viva¨ y ésta, se había cerrado por completo, acogiendo prietamente en su interior el papelito que yo le había ofrecido. Al parecer, se puede hidratar las veces que se quiera y finalizados los 7 días, volver a dejar secar y pedir más deseos. En mi caso, jamás volveré a hidratarla ya que en su interior, reside mi petición y no va a variar.
Que son los deseos si no el producto de las no acciones, de aquellas a las cuales no ponemos remedio o, sabemos que no lo tienen. Deseo que acabe la hambruna en el planeta, deseo que acabe la tasa tan elevada de mortandad en los niños en el tercer mundo, deseo que no se les explote, que no se abuse de ellos sexualmente, deseo que dejemos de fingir amor hacia el prójimo, deseo que acaben las guerras de una vez por todas, incluyendo la de los sexos, deseo que le hombre llegue al autoentendimiento para así entender a los demás... deseo, deseo, deseo.. NO, no lo deseo, lo quiero, lo reclamo ya que al igual que al resto de los seres, me pertenece. No deseo nada que no me pertenezca por ley, y no hablo de la ley que encierra la trampa, hablo de la ley humanitaria. No se que desear para mi misma, siento como un espacio vacío, más que vacío abierto, donde se puede albergar, donde se acoge aquello que va llegando al igual que se marcha. Podría desear que me tocase la lotería, pero sé que si quiero dinero, me lo tengo que currar, si es que me dejan. Podría desear lo mejor para mi hijo, pero eso no lo deseo, lo quiero y por eso, ni pienso en ello.
El deseo, es un arma de doble filo. Por un lado, podemos llegar a alucinar con ellos y por otro, encontrarnos en el más profundo aletargo, esperando a que se cumpla.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Campo de cebollas

Si he de describir el desarrollo de mi ser - no me atrevo a generalizar- lo haría describiendo a una cebolla. Capas y capas prietas unas contra la otra, cuantas más mejor, equivalentes cada una de ellas a todo aquello que ocupa lugar en mi... como pueden ser los distintos conocimientos adquiridos,jajajaja!: Educación, cultura, religión, política, amor, amistad,fe, disciplina, paz, guerra, sí, no... y un sinfin de retahilas que se venden baratas pero que resultan ser tan caras. Me doy cuenta que, todas esas capas, me han ido ahogando, que sin saberlo, se me han estado adheriendo día a día y que a pesar de ser una cebolla bien hermosa y prieta, ello, hace que mi tallo se asfixie. Todo ese contenido que me aporta cada capa, está formado de infinidad de predicaciones de infinidad de cebollas que le plantan la capa a otras - a mi por ejemplo- pero que ellas, no se dejan poner ninguna. Se hablaba del 11-11-11 como un momento catastrófico y en su día, aquellos que lo predicaban se hicieron de oro a consta de las millones de cebollas que aceptaron llevar a cuestas esa capa. Mañana es tal fecha y la O.N.C.E ha hecho el agosto vendiendo sus cupones, tambien predicando. Lo proximo es el 12-12-12 y ya otras cebollas, preparan las capas que deben distribuir a las demás cebollas, para así volver a enriquecerse. Llegan las generales y más cebollas arrojandonos capas y más capas que ya ni damos de sí a ponernos. La educación que no educa, otra capa... La farsa que representa cada instante de la vida, la falta de ética en el amplio sentido de la palabra, más capas. Cuatro predicaban para muchos pero ahora, muchos predican para cuatro y la cuenta, ya no cuadra. Nos engañamos los unos a los otros constantemente, sin saber, que uno, siempre resulta ser, tú. Desde hace tiempo, voy desprendiendome de cada una de esas capas, siento un gran aislamiento de todo lo que se predica y en nada creo y me siento neutra. Hoy he escuchado una frase que me ha hecho mucha gracia, decía así; hay que alejarse de las falsas creencias jajajajajaj!! esta ha sido mi última capa.... que alivio!

I was dreaming in my dreaming...

Vuelvo a darle vueltas al mundo de los sueños y, me pregunto que, si éstos se representan como escenas vividas practicamente basándose en la realidad más real, a pesar de que en la mayoría de las veces no tengan ni pié ni cabeza y sean de completa irrealidad, entonces, como he dicho, me pregunto: Cuando un recién nacido, con tan solo unas horas de vida, duerme sin haber tenido ocasión de formar aun parte de este mundo, cuando tan solo sabe respirar, cuando no ha abierto los ojos, cuando no conoce los colores, las formas, cuando no conoce nada... ¿por qué sonríe mientras duerme? ¿que será lo que le hace sentirse tan feliz sin haber experimentado la felicidad? Será que aun cree estar dentro de la placenta, tan calentito y protegido. Será que sonríe porque aun le llegan las vibraciones del corazón de su madre. Será que recuerda el colorido de la placenta y cree formar parte del arco iris. O, será que la memoria transferida genéticamente, sea la que le esté aportando imágenes agradables de antes de su llegada, de antes de ser a penas engendrado.
También me pregunto, como soñara un invidente que lo ha sido de nacimiento. Que permanecerá en la misma condición que el recién nacido,posiblemente, el resto de su vida. Sin saber de que color son los colores... sin poder identificar las estaciones del año distinguiendolo por el aspecto cambiante de los campos. No saber como es el sol a pesar de percibir su calor. No saber lo que es sentirse arropado por las estrellas y la luna. Aunque estos desarrollan el resto de los sentidos de forma extraordinaria, no imagino sus sueños. Serán formas y conceptos distorsionados basándose en como éstos imaginan será la vida y las personas que les rodean. O,solo sueñan voces en el vació de la oscuridad. También me pregunto, que diferencia hay entre ellos y nosotros a la hora de nuestros sueños... ¿quien es realmente el ciego?