miércoles, 29 de junio de 2011

Flesh and blood

Si me pongo a pensar o, más bien dar marcha atrás día a día hasta el momento donde empecé a tener conocimiento de mi existencia, me doy cuenta de que todo lo que he vivido desde ese momento hasta este actual, ha sido para estar ahora aquí, escribiendo este texto y tocándome el lóbulo de la oreja derecha. Todo este tiempo de estragos, sufrimiento, alegrías, penas, amor... para llegar aquí, a este preciso instante. Y, por qué? me pregunto. Que tiene de especial este escenario, el que me toca vivir hoy? y el que me tocará vivir mañana y, así sucesivamente hasta el ultimo momento de mi existencia.
En realidad, todo lo que hemos vivido hasta hoy, ha sido para precisamente vivir hoy. Que larga espera para cada segundo de aliento venidero. De nada sirve haber respirado ayer, ni antes de ayer, si no hubiera un hoy. Pero hoy, no sería otro día más de no haber habido un ayer. Y mañana no existiría, de no ser por hoy. Se que todo lo que estoy viviendo hoy, empezó a tejerse en un preciso instante, cuando una serie de circunstancias se alinearon, ya sean planetas y elementos o, simplemente eso, líneas trazadas al azar, esas que todos tenemos predestinadas. Lo que soy, lo he sido desde siempre y siempre lo seré . De nada sirve enmascararse, esconderser de si mismo ,si siempre, nos vamos a encontrar en el mismo lugar ya que somos inmóviles por mucho que nos movamos. Jugamos a pasar el tiempo sin tener en cuenta que no nos pertenece, que nos es prestado , segundo a segundo y, ni tan siquiera tanto.