Llevo meses en “Stand By”,justo así... el círculo en el que me relaciono se limita/extiende en ir a trabajar y vuelta a casa, no salgo a tomar esa cerveza ni a patearme los Madriles, no mantengo conversaciones con extraños, que tanto extraño...
no leo, aunque creo haber dejado de hacerlo casi antes de aprender... apenas escribo aunque tampoco lo hago, solo uno vocales y consonantes con el fin de intentar expresarme...pienso mucho en todo y en nada, sigo un ritmo al que he llegado, no sé por qué ni por qué no... no sé si espero, creo que no. El tiempo va transcurriendo y no se donde llegará... o donde me llevará, es lo que toca… no estoy bien ni mal, tan solo estoy y ello, creo que es suficiente en estos momento... no quiero empujar, más bien me siento como una ola que se deja arrastrar plácidamente por las corrientes y mareas, formo parte del océano pero no estoy a la deriva, todo océano tiene su costa y esta un faro que alumbra, que ilumina para que podamos desembarcar sin embarrancar, a su debido tiempo. Esa costa puede ser la elegida pero también nos puede elegir o tocarnos al azar o predestinada... pero sea cual sea su procedencia, nos toca decidir seguir tierra adentro o tirar nuevamente a la mar.
¿Será desidia o qué será?
-No, es tener la necesidad de dejarse llevar... por todo y por nada a la vez, si en realidad la tierra no es plana y todos los puntos cardinales tienden a encontrarse entre sí en un mismo punto de llegada... ¿o es de partida? Sabemos si vamos o venimos, si ya hemos llegado o si tan solo estamos a punto de partir. Y qué mas da, si el principio y el fin solo son palabras inventadas... como el amor y el odio, el frío y el calor el blanco y el negro, tú y yo...
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