martes, 20 de agosto de 2024

Alma Gemela

 Cuando una mujer o un hombre jóvenes aun, se les ve juntos o enamoran de alguien con mucha diferencia de edad, tanto, que choca verles, por lo general se piensa que es por dinero. 

De entrada, nunca he pensado así, al menos no cuando se da entre personas no famosas. Hay de todo, eso es cierto y, posiblemente en la mayoría de los casos, el interés ande de por medio.

Hace un año aproximadamente, llegué a un pueblo cualquiera en una comarca cualquiera y, conocí a un señor mayor que resultó ser mi vecino. Persona amable, respetuosa, generosa y muy entrañable. Sufrió una caída en su casa y sus familiares(él vive solo y es aun "mozo") le llevaron a una residencia. Al despedirme de él me dio mucha pena y le echaba de menos. Fui a visitarle a la residencia y charlamos como dos personas de la misma edad, la mía. Semanas después él se encontraba bien y pidió voluntariamente el alta. Su familia obviamente se negaba a esta decisión por él tomada, pero esta persona rige perfectamente a pesar de sus casi 90 años de edad. Este "mozo" es de una época complicada, lo vivido por los nacidos por entonces, ni nos lo podemos imaginar.

Cuando voy a mi casa del pueblo, el se pasa y golpea la puerta con su bastón (aun no he puesto timbre) y nos saludamos y charlamos un rato.  Desde niña, siempre me gustó la compañía de los mayores, iba con mi abuelo mucho en vez de con mis amiguitas, le observaba jugar a las cartas con sus amigos en la mesa del parque. Las historias que repetidas veces contaban, me encantaban. 

El "mozo", así nos vamos a referir a él, es distinto a aquellos mayores del parque, y distinto a los mayores de su época. Es una persona que en mi opinión le tocó nacer en la época que no le correspondía.

Me disponía a salir a pasear un rato y él estaba sentado en el banco de su puerta. me dijo, si vas al pueblo no te acompaño que hay que subir y bajar cuestas, si quieres te llevo a ver los viñedos. Y eso hicimos.

Luna a un lado y puesta de sol al otro, viñedos, frescor, conversación agradable, buen ritmo al caminar.
Es alto para su época, 170cms y se mantiene delgado y en forma, el bastón lo lleva por costumbre. Aun ahora, con su edad, mantiene unos rasgos dulces y aniñados, pocas arrugas y casi todo el pelo. Está mellado de un lado, pero le hace muy gracioso. Es limpio, aseado, no fuma, no bebe, habla con mucho respeto y coherencia. Le pregunté; por qué no te casaste nunca, a lo que contestó: se fueron casando mis hermanos y yo me quede para cuidar de los padres, y después cuando me quedé solo ya era mozo viejo. 

Me gusta estar con él aunque es mayor que yo casi 30 años. Pienso que tiene las cualidades que siempre he deseado encontrar en una persona, en un hombre y del cual me habría enamorado, pero obviamente, la vida es caprichosa.

Anoche soñé con él...