El lenguaje es una de las formas de comunicación del ser humano, es la más genérica ya que por defecto, casi todos ¨sabemos¨ hacerlo... soltamos palabras que hemos aprendido a pronunciar y que el significado de estas se encuentra en numerosos diccionarios y en distintos idiomas. Algunas de estas, dependiendo del idioma de origen,no llegan a tener traducción ya que son palabras que están formadas partiendo de una tradición o cultura y que no cuadran o encajan en otras. No uso ni tengo un vocabulario extremadamente extenso,nunca me ha preocupado la sencillez con la que me expreso ya que así, me entiendo mejor. No obstante, no dejo de reconocer que es un don, tener don de palabra... me basta con lo que tengo ya que son palabras que comprendo. Puede que el hecho de tener esta limitación, sea que me gusta sentir las palabras, estar segura de que lo que sale de mi boca, es justo lo que siento en mi interior y que entiendo su significado más allá de lo literal, llevarlas más allá de la definición que a estas se refiere. Hoy estaba pensando en lo que significa la palabra fidelidad y de lo que para mi significa en realidad. La fidelidad parece ser que en general, y en lo primero que se clasifica es en el ámbito matrimonial; ser fiel a la pareja y convertir la palabra en una obligación moral. Para mi,sentir esta palabra y pronunciarla convencida de lo que para mi significa, me proporciona una enorme dosis de paz y, no hablo de estar segura de que no me pondrán los cuernos, obviamente...
La fidelidad es algo muy difícil de conseguir ya que implica convicción absoluta hacia lo que se es fiel pero ante todo, lo difícil es no tener que ponerse a sí mismo en duda. Para mi,significa serenidad,fluidez,calidez,ofrenda,bienestar y por supuesto,un gran aporte de paz interior.
miércoles, 25 de enero de 2012
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